Indicaciones Prácticas

Para disfrutar del queso Son Mercer de Baix, nada mejor que seguir las indicaciones de degustación, corte y conservación elaboradas por los expertos.

Degustación

  • Tomarlo a la temperatura adecuada entre 20 y 22ºC.
  • Para apreciar todos los matices en su intensidad hay que masticar lentamente y distribuir el queso por todos los rincones de la boca.
  • Los panes, crakers y galletas saladas son buenos acompañantes para el queso.
  • Las frutas frescas y jugosas (uvas, manzanas, peras, higos) acompañan muy bien al queso pues dejan la boca limpia y complementan su sabor; además, realzan con su colorido y predisponen a la cata.
  • Las frutas desecadas (albaricoque, melocotón) y los frutos secos (avellanas, almendras, pistachos) cortejan también muy bien a nuestros quesos.
  • Acompañarlo de vino blancos aromáticos o espumosos (cava, champaña).

Conservación

  • El buen queso, como el buen vino, hay que mimarlo. Una bodega es el sitio ideal pero es difícil conseguir una temperatura fresca (8-15º C) y una humedad alta (80-90%).
  • El frigorífico es la mejor opción pero produce “frío seco” y roba humedad al queso desecándolo, por lo que hay que tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
  • Para consumir pronto (un semana máximo) y evitar que se agriete o reseque es conveniente que siempre esté envuelto o protegido.
  • Si se quiere conservar más tiempo se recomienda envolverlo en un paño de algodón ligeramente humedecido y guardarlo en la parte menos fría del frigorífico.
  • El queso una vez cortado, por su alto contenido en grasa, se atempera rápidamente, por lo que sacándolo entre 30 y 60 minutos antes de saborearlo, es suficiente.
  • Una buena solución es untar la corteza con aceite y/o manteca para evitar que se agriete.
  • No aconsejamos el envasado al vacío para conservaciones muy prolongadas, solo para viajar.
  • El envasado al vacío, a la larga, modifica la textura y el sabor del queso, por lo que sólo es aconsejable para quesos muy maduros, con alto extracto seco, y de corteza limpia y seca.
  • Una vez cortado el queso y para evitar que el moho penetre en el interior, se pueden “tapar” los ojos con un cuchillo, pasándolo por la superficie como si “untásemos” mantequilla. De esta manera taponamos la posible entrada de oxigeno al interior y evitamos la aparición de moho.

Corte

  • Los quesos semicurados poseen una textura mantecosa por lo que se pueden cortar en lonchas finas o muy finas. Los quesos más curados poseen una textura más friable y el corte requiere lonchas más gruesas.
  • Para realizar un buen corte conviene atemperar el queso a 22-24o, el corte es más limpio, el cuchillo ofrece menos resistencia y existe menos peligro de que se resquebraje, sobre todo en los curados.
  • Una forma original de cortar el Reserva Especial Selección sería con el punzón que se utiliza para el parmesano. Se introduce el punzón y se van cortando pedazos pequeños a forma de lascas. También se presta muy bien para rallar y su uso en la cocina. Comparado con otros quesos europeos, se necesita menor cantidad de producto y posee una mayor intensidad de sabor.